Londres curioso. 9 Lugares recomendados por bloggers de viaje.

MUDCHUTE PARK de Manu, El Avión de Papel.

Siempre que voy a Londres me gusta ir a Greenwich. Nunca he entrado a ver el meridiano, pero me agrada mucho pasear por su parque. Llegar allí entre semana y temprano, cuando los turistas todavía no han llegado a plantar banderas y conquistar el lugar. Disfrutar de la soledad y sacar fotos panorámicas si la niebla y el smog lo permiten. Aunque esta vez también iba con la intención de descubrir algunos de los secretos que encierra la Isle of Dogs.

Así que bajé desde lo alto del parque y al lado del barco de la Cutty Sark encontré mi camino. Debía de cruzar el río por el impresionante Greenwich Foot Tunnel, una majestuosa obra de ingeniería de 370 metros de largo, que se construyó en 1902 para que los operarios de los muelles que vivían al sur del Thames pudieran llegar fácilmente a sus puestos de trabajo. Sale uno por el extremo norte algo dubitativo, pero enseguida encuentra un punto de referencia. Allí dónde el Támesis traza una U se levantan auténticos gigantes de cristal. Es la ya no tan nueva zona financiera de Londres: Canary Wharf, que toma su nombre del intenso tráfico marítimo mantenido con las Islas Afortunadas allá por el siglo XVI. El dominio de los rascacielos es tal que es difícil dejar de mirarlos. Por eso es tan sorprendente encontrarse de repente en Mudchute.

Mudchute Farm & Park es una de las granjas urbanas más grandes de todo Europa, y nació como resultado de las excavaciones para poder construir en Millwall Dock. La tierra allí depositada se transformó en un lugar fértil y próspero que pronto atrajo vida salvaje. El contraste es tan fuerte que parece casi imposible estar en plena naturaleza, o que las ovejas pasten tan tranquilas, ajenas al bullicio financiero. Pero como alguien me dijo una vez, Londres es así, una gran mezcla de muchas cosas extraordinarias. En Mudchute conviven más de 100 especies diferentes en libertad, en grandes parcelas y atendidas por varios cuidadores. Hay caballos preciosos, cerdos (cuidado, ¡muerden!), cientos de aves distintas, alpacas mascando y un animal que nunca había visto en mi vida: el pony de las Shetland. Pasea con calma y regálate un tiempo en Mudchute. Conecta con tu parte más natural muy cerca del centro de Londres.

TEMPLO HINDÚ Shri Swaminarayan Mandir por Vipavi.

En el barrio de Neasden, en un rincón poco conocido por turistas e incluso por londinenses, se encuentra el templo hindú más grande fuera de India. Construido por miles de voluntarios únicamente con mármol y con métodos tradicionales, en él se reúnen gran número de hindúes para realizar asambleas, festivales o simplemente para charlar.

En el recinto se encuentra el Mandir, lugar de culto, aprendizaje, celebración y comunidad, de una belleza impresionante; y junto a él el Haveli, de madera y artesanía tradicional que te transporta a la India en pocos minutos y te dejará con la boca abierta por su tallado imposible.

Está prohibido hacer fotos en su interior, solamente está permitido en el patio, y no se puede acceden al interior con mochilas, bolsos, etc. Enfrente del templo, hay una consigna gratuita. Las normas son las mismas que en cualquier templo hindú: debes descalzarte a la entrada y es obligatorio vestir con ropas por debajo de la rodilla y con mangas, si se va muy veraniego te pueden prestar un sari. Merece la pena la visita, además es gratuita.

CURRY en HANBURY STREET por Molly S. de Piccavey.

Mi recomendación es probar curry y comida étnica en el este de Londres. La zona de Brick Lane está repleta de restaurantes hindúes con los mejores currys que puedes encontrar fuera de Asia. En la misma calle de Brick Lane hay un restaurante tras otro. Elige uno que te guste y déjate aconsejar por los hosteleros. Tienen currys muy suaves hasta los más picantes. También están recomendables los salsas de mango y chutneys.

Además esta zona tiene tiendas de ropa vintage, con piezas auténticas de los años 20 a 80. En Brick Lane y Hanbury street se encuentra la mayoría. E1 es una barriada ecléctica y colorida de Londres, una pista menos conocida en lasrutas habituales de la capital británica.

CEMENTERIO HIGHGATE por Paulo de Coge el Vuelo.

Highgate es un barrio de Londres situado un poco más al norte de Camden Town, en la zona 2, algo apartado del centro. Y allí hay uno de tantos cementerios londinenses. Mi principal decisión para ir fue porque resulta que es donde está la tumba, y donde está enterrado, obviamente, uno de los pensadores y filósofos más influyentes de toda la historia: Karl Marx. Reconozco que mi interés principal por visitar Highgate era por ver su tumba.

Aprovechando que hace menos de un año volvía a Londres (Octubre de 2015), le dije a mi compañera de viaje que quería ir a Highgate a ver la tumba de Marx. Ella aceptó, se apunta a un bombardeo y este tipo de visitas llaman la atención. Así que el último día, antes de marcharnos a Amsterdam, iniciamos el camino hasta este cementerio, cruzamos todo el barrio y pudimos disfrutar del urbanismo y la arquitectura más típicas de Londres, unos edificios dignos de admirar y que no saldrán en ninguna guía turística. Llegamos al cementerio, tan grande que está dividido en dos y por el medio pasa una calle.

Tras informarme en las redes descubrí que la tumba estaba en el lado este del cementerio, así que entramos en la caseta que había a la entrada. Ahí nos atendió un señor mayor, con pintas de loco, supongo que es necesario si trabajas de guarda de un sitio así. Nos cobró 4 libras por entrar y nos dijo la hora del cierre, comentando entre risas que tocaría la campana antes y después cerraría las puertas. Imagina la gracia de pasar una noche de octubre en un lugar así, es muy tétrico. Cuando entras en este cementerio encuentras un camino asfaltado que da la sensación de orden y descanso pero, si vas un poco más allá, verás que el caos y el desorden reinan por todo el cementerio. Debido a su sobrepoblación y falta de fondos en las épocas de la peste, el cementerio se volvió muy caótico y aún hoy mantiene ese desorden, lo que le da un toque muy lúgubre y digno de un cementerio. De hecho ha sido el cementerio que más me ha gustado de todos los que he visitado. En esta visita me limité a encontrar la tumba de Marx, bien marcada en el mapa que te dan en la entrada (saben que es su mayor reclamo turístico) y ver sus alrededores. La hora de entrada era muy cercana al cierre y no me arriesgaba a quedarme dentro con el viejo loco cuidando del cementerio. Así que fui directo.

La tumba es un monumento al filósofo y no tiene pérdida, en cuanto paseas un poco ya descubres dónde está. Al entrar tenía miedo de no encontrarla pero, como verás en la imagen, la tumba esta hecha para destacar. Recomiendo sin duda una visita a este cementerio, independientemente de la ideología política, aquí hay mucho más que ver. Por ejemplo en este cementerio podrás encontrarte a: William Friese-Greene (padre del cinematógrafo), George Elliot (seudónimo de Mary Ann Evans, escritora victoriana), Michael Faraday (descubridor de la inducción electromagnética, el diamagnetismo y la electrólisis), padres y hermanos de Charles Dickens y muchas más personalidades que podrás descubrir si lo visitas. Espero que tengas suerte y sólo encuentres sus tumbas, aunque sería muy divertido poder encontrártelos a ellos...

EL METRO por Rocío T. de Un Plan Infinito.

The Tube, como llaman al metro en Londres, fue una de las primeras cosas que conocí cuando llegué a londres... Era una tarde fría de noviembre; llegué a Londres sola; con un chaquetón a cuadros y una maleta. Nadie venía a buscarme al aeropuerto; ni siquiera tenía mapa del metro pero sabía que llegar de Heathrow a Southgate no podía ser difícil. Después del control de pasaportes y de recoger mi maleta, comencé a seguir la flecha amarilla que me llevaría al metro...estaba todo tan bien señalizado, que sólo tenía que seguir la línea amarilla como cuando haces el Camino de Santiago y además en el billete estaba el mapa.

Después de aquel comienzo; el metro se convirtió en mi llave de la ciudad; me llevaba a todas partes...y puedo decir que he pasado muchas horas en el metro; aunque es cierto que sus estaciones no son como las preciosas estaciones moscovitas o las artisticas estaciones de Estocolmo...En ellas he escuchado buena música, he leído, he entablado conversaciones con extraños que me confundían con alguien, a veces con una tal Nicoletta; nunca he sabido quien era... o simplemente me preguntaban en que idioma estaba el libro que leía. También he escuchado a frenéticos predicadores que se subían en una estación y bajaban en otra y he comido mientras esperaba a alguien o hacía un cambio de línea y sobre todo; he observado a la gente, una de mis pasiones ocultas ;) Simplemente mirar a la gente y tratar de imaginar como serán sus vidas...El metro de Londres es perfecto para realizar esta extraña actividad :)

POPPIES por Virginia de 365 Sábados Viajando.

Una visita a Londres da para mucho, o para poco, depende de cómo se mire… Londres siempre nos ha parecido una ciudad a la que volver una y otra vez, así que no hace falta agobiarse por la cantidad tan grande de lugares que se pueden visitar, y es que con una primera visita a Londres no das abasto.Ahora…comer hay que comer sí o sí, en todas tus visitas a la ciudad que fue el centro del mayor imperio que existió en el S. XIX tienes que llenarte de energía para corresponder al ritmo que impone la ciudad. Y no se nos ocurre un mejor exponente que simbolice la gastronomía londinense que el famoso Fish and Chips. Sin duda, el mejor lugar donde probarlo es en Poppies, en concreto en su sucursal de Spitalfields.

La decoración del local, y la calidad del producto le han hecho el valeroso ganador del mejor Fish and Chips durante varios años, y desde luego uno de los más recomendados por todos los amantes de Londres y de este manjar tan tradicional que, sin embargo, nunca pasará de moda.

Dirección Poppies Spitalfields: 6-8 Hanbury Street London E1 6QR. Precio medio: Alrededor de 5 Libras. Consejo: Hay varios tamaños para llevar y son platos muy grandes, con uno medio para dos es más que suficiente

KEW GARDENS por Paula y Andrea de Viajar y Otras Pasiones.

A unos 10 kilómetros al sudoeste del centro de Londres encontramos el sitio Patrimonio de la Humanidad más grande de la capital británica: el jardín botánico de Kew Gardens.

Fundado ni más ni menos que en 1759, su principal atractivo son los invernaderos. Éstas construcciones en cristal, de diferentes estilos y antigüedad, están llenitas de plantas de todas partes del mundo. La Palm House Parterre es la joya de la corona del parque, y es que su estructura de cristal tiene un aire vintage precioso, y dentro tiene plataformas por las que pasear para ver las plantas desde arriba.

No solo de invernaderos vive Kew Gardens, hay un montón de cosas: un huerto, un jardín de estilo mediterráneo, una pagoda, un pequeño lago, la típica plataforma circular que va por las copas de los árboles (no apta para personas con vértigo) y The Hive, una estructura moderna y muy fotogénica que simula ser un panal de abejas. Los más peques alucinarán con los dos parques, uno cubierto y otro al aire libre, con atracciones súper chulas e imaginativas.

En el mapa las distancias parecen enormes, pero da tiempo a ver todo en medio día. Nosotros estuvimos 6 horas porque nos lo tomamos con mucha calma. Para llegar, hay que tomar la District Line (línea verde) de metro o la Overground (naranja) y bajarse en la parada del mismo nombre. La entrada cuesta 15’50 libras y recomendamos comprarla por internet (no hace falta imprimir) para evitar colas, sobre todo si vais en fin de semana.

Aunque haya muchas atracciones gratuitas en Londres, merece la pena visitar Kew Gardens. Es un sitio diferente y muy fotogénico. Os gustará especialmente si sois fan de los jardines botánicos (como nosotros), si tenéis peques y, sobre todo, si necesitáis un poco de verde y de espacio en la jungla de cemento que es Londres.

HACKNEY City Farm por Bo de El Mundo Ok.

¿Una granja en pleno Londres?Así es…Cuando piensas en viajar a Londres, lo haces soñando con hacer las fotos de rigor y para publicar sobre todo en Instagram, llámese: Big Ben, con la Noria y sus espectaculares vistas, y demás clásicos que hay en el centro de la capital británica, como el famoso Tower Bridge ¿Verdad? Y dejamos cosas o lugares no tan conocidos para otras veces.

Muy cerca del centro, en la zona de Hackney, tu cámara y sentidos se pueden encontrar con una preciosa granja, se trata del Hackney City Farm; un oasis en pleno estrés, que puede significar una gran ciudad, que avanza a diario como un timelapse.

Cuando supe de este lugar, no dudé en ir, ya que además está bastante cerca de la zona que suelo quedarme en Haggerston. Es así que con mi espada (digo mi cámara) pude ir a comprobar in situ de este lugar no tan famoso. He de confesar que me sentí raro y a la vez me divertí, ya que no imaginas que en Londres puedes librarte por un instante de tanto concreto, y cada vez edificios más altos, para disfrutar de una forma diferente.

Ideal para ir con niños, la entrada es gratuita. Además, tiene una cafetería muy cool para después tomar o comer algo. Sin dudar, aprovecha para ir a este lugar y así darle un toque rural a tu viaje a Londres.

MUSEO de SHERLOCK HOLMES, por Luis Gago de Destino Ikigai.

¿Cómo se sabe si un personaje de ficción es archifamoso? Cuando hay mucha gente que piensa que existió de verdad. ¿Ya sabes de quién hablo? Elemental, querido lector, del mayor detective de todos los tiempos, Sherlock Holmes. La creación literaria de Arthur Conan Doyle vivió en la ficción en el 221B de Baker Street, y si en tu visita a Londres te pica la curiosidad, puedes acercarte a ver la que fue su casa en tantas y tantas historias de crímenes y misterios.Como en la realidad no existía esa dirección, tuvieron que inventarla, y la han encajado entre los números 237 y 241, donde encontrarás la casa museo del famoso detective, regentada por la Sherlock Holmes Society.

Nada más llegar te chocará encontrarte con un policía ataviado con un uniforme de Scotland Yard del siglo XIX vigilando la puerta, como si en ese momento el Inspector Lestrade estuviera visitando a Holmes y Watson pidiéndoles ayuda para resolver un nuevo crimen. La casa es un museo de objetos victorianos que bien pudieron utilizar los habitantes de tan famosa mansión. Todo está colocado como si sus habitantes se acabaran de ausentar: la pipa en la mesa, su famoso violín reposando en una butaca, una carta a medio escribir...También tienes una tienda de recuerdos donde puedes comprar, entre otras muchas cosas, la característica gorra de Sherlock Holmes o el bombín de Watson.

Si comenzaba diciendo que mucha gente cree que Holmes, Moriarty y compañía fueron reales, tal vez algo tenga que ver la placa que adorna la fachada del edificio, donde aparecen las fechas entre las que el detective habitó esta casa. Quizás ese sea el último misterio que rodea a Sherlock Holmes... ¿te animas a venir e investigarlo?

Muchas gracias a todos por vuestras recomendaciones, mi libreta para viajar a Londres está llena de ideas y sitios geniales que espero poder visitar pronto. Aunque a este ritmo, después de hacer es post sobre los barrios londinenses y sus imprescindibles...¡me tendré que quedar un mes!