Londres, un paseo cultural. 7 lugares recomendados por bloggers de viaje.

NATURAL HISTORY MUSEUM por Lorena, La Ratona Viajera.

British Museum, National Gallery, Tate Modern…otra cosa no, pero en Londres museos hay unos cuantos, y lo mejor de todo es que la mayoría son de acceso gratuito.Después del British Museum, que de inglés tiene poco más que el nombre, mi favorito es el Natural History Museum.

El edificio en sí es espectacular tanto por dentro como por fuera, pero sin duda todo su atractivo está en los tesoros naturales que alberga. Para mí lo más espectacular poder ponerse a los pies de la secuoya gigante de más de 1.300 años de antigüedad. Y empezar a leer cómo ha ido transcurriendo la historia de la humanidad a través de sus anillos como medida de tiempo.

Otros dos grandes atractivos del Museo de Historia Natural de Londres son el inmenso esqueleto de dinosaurio que hay justo en el hall de la entrada o la zona de animales marinos. Aquí podrás ver el esqueleto de una ballena azul. Sin duda es un plan perfecto para descubrir más en profundidad el mundo animal, especialemente de aquellos que ya están extinguidos o que están camino de hacerlo.

MUSEO BRITÁNICO y su colección de Arte Asirio por Jordi de Mil Viatges.

Londres es una de las megalópolis de Europa. Grandes parques, monumentos excepcionales, interesantes mercadillos y un ambiente cultural siempre a la vanguardia de Europa hacen de la capital británica una ciudad a la que regresar.

Sin embargo, hay un lugar al que retorno cada vez que visito Londres. Se trata del British Museum. Y más, concretamente, a la Colección de Arte Asirio del British Museum. La gratuidad del equipamiento favorece, además, que cualquier hora muerta merezca ser aprovechada para disfrutar de esta colección que nos recuerda la esplendorosa civilización mesopotamia que llegó en tiempos de Sargon II a sus momentos de máximo esplendor.

La colección nos muestra los tesoros hallados en las 4 grandes capitales imperiales: Nimrud, Assur, Ninive, Duro Sharrukin. Y particularmente, el conjunto de paneles con bajorelieves que decoraban los palacios reales que, desgraciadamente, no han llegado a nuestros días. Escenas de cacerías se alternan con escenas de guerra y de la vida en palacio, con el indisimulado objetivo de ensalzar la figura real, casi deificada. A ello hay que unir a los fabulosos lammasus, las figuras mitológicas con cuerpo de toro, alas de águila y cabeza humana que se ubicaban en las puertas de los principales palacios de aquella civilización extinta.

Una y otra vez regreso a la colección de arte asirio del Museo Británico de Londres. Y una y otra vez disfruto con nuevos detalles.

IMPERIAL WAR MUSEUM por Jose de El viaje me hizo a mí.

Tengo un cariño especial por Londres ya que viví allí durante 9 meses. Y no una época cualquiera… En Londres fue mi Erasmus, una experiencia que me marcó como persona, cambió mi vida y que me hizo conocer a algunos de los que hoy son mis mejores amigos.

El rincón de Londres del que he decidido hablaros es el Imperial War Museum, o Museo de la Guerra. Está en la parte sur de la ciudad, muy cerca de donde yo vívía cruzando el puente de Waterloo. En Londres los museos son gratis por lo que fui a visitarlo en tres ocasiones con las diferentes visitas que me hicieron.

En este museo hay una enorme colección de artilugios que se han empleado en todas las guerras en las que ha participado Reino Unido (por desgracias muchas), especialmente de la Primera Guerra Mundial. Cañones, pistolas, fusiles, lanzas y un sinfín interminable de imágenes, vídeos y documentos oficiales y privados de militares y sus familias.Recuerdo que a mí me dejaron especialmente impactado unas máscaras antigas que se repartían entre la población civil durante la Segunda Guerra Mundial ante la posibilidad de bombardeos con armas químicas. Y eso pasó hace solo 70 años…

Si te pica un poco la curiosidad la historia no dudes en ir, no te decepcionará en absoluto. Y si no te dejo un recorrido para visitar Londres en tres días para que tengas otras opciones.

THE PHOTOGRAPHERS' GALLERY por Miguel de El Viaje de Sofi.

La primera vez que fui a Londres lo hice sin dinero ni billete de regreso. En los 90, los universitarios españoles también vivimos nuestra “crisis”. Con unas expectativas de trabajo nulas, el único recurso posible para nosotros era volar a la capital inglesa. Una huida hacia delante que me sirvió para mejorar mi inglés, pero sobre todo para descubrir una de las ciudades más fascinantes del planeta.

Durante seis meses, trabajé de Au pair con una familia bastante peculiar. Los fines de semana los tenía libres y aprovechaba para acercarme a Londres, donde vivía Mónica. Por aquel entonces no sabíamos lo que era un blog de viajes, aunque sí teníamos claro que nos gustaba viajar y que queríamos trabajar en el mundo del turismo.

En nuestros recorridos de sábado y domingo, visitamos parques —muchos, porque eran gratis—, iglesias —tampoco había que pagar entrada—, algún pub y varios museos. Mi fascinación por el arte surgió en la adolescencia y todavía la conservo. La oferta de Londres es espectacular. Es muy difícil elegir. Uno de mis favoritos sin duda alguna es la Tate Modern, que por aquel entonces todavía no estaba en su actual ubicación. Pero si tengo que recomendar uno original y diferente y que te atrapará desde el minuto uno ese es The Photographers' Gallery. Un museo dedicado por completo al mundo de la fotografía. Un paraíso para los amantes de la cámara. Aquí tienes de todo: exposiciones increíbles,cursos, eventos, librería —repleta de libros fascinantes que harán temblar tu tarjeta de crédito— y un café donde rematar la jornada.

Nosotros ya estamos preparando la próxima escapada a Londres para 2018 y seguro que uno de los días lo pasaremos aquí. Espero que la disfrutéis tanto como yo.

Dirección : 16 - 18 Ramillies St, London W1F 7LW.

Página web : http://thephotographersgallery.org.uk

Horarios : Lunes a sábado, de 10 a 18. Domingos, de 11 a 18.

Precios : 4 £, en taquilla. 2 £, si la compras por Internet. Y gratis, si entras antes de las 12 del mediodía.

TATE MODERN por Patri, La Cosmopolilla.

Cuando me preguntan cuál es mi museo preferido de Londres siempre respondo “la Tate”. No es el British, con sus impresionantes frisos del Partenón (que deberían estar en Grecia, ejem…) o la deslumbrante colección de joyas de la reina de Inglaterra que se guarda en el corazón de la Torre de Londres. Cierto. Menos impresionante y famosa, pero la Tate para mí es especial. Su estructura de fábrica de los suburbios industriales, la que fue la antigua central de energía de Bankside en la orilla sur del Támesis, acoge el arte más ecléctico y contemporáneo. Para mí la Tate simboliza ese Londres que despuntó, se puso a la cabeza de las vanguardias artísticas. Por sus amplias galerías me quedo extasiada contemplando los colores de las paletas del gran Picasso, Salvador Dalí, Mark Rothko o Andy Warhol. ¿Un secreto? Me encanta la cafetería acristalada del último piso, donde sentarse a tomar una bebida admirando la magnífica cúpula de San Paul y el Puente del Milenio.

VICTORIA AND ALBERT por Andrea y Paula, Viajar y Otras Pasiones.

De todos los museos que hay en Londres, el más molón es el Victoria and Albert (V&A). Inaugurado en 1862, se presenta como una colección de arte y diseño, pero ahí hay de todo: ropa, muebles, joyas, vasijas, cuadros, todo tipo de antigüedades... de todas partes del mundo.

Desde que pones un pie en el hall sabes que es un museo diferente. Entre sus más de 4 millones y medio de objetos y 145 galerías, no hay que perderse las dedicadas a Asia, nos parecieron preciosas. También nos llamó mucho la atención una sala con copias de diferentes obras de arte importantes, entre ellas el David de Miguel Ángel, y es que antiguamente no era tan fácil viajar como ahora, pero las élites inglesas querían disfrutar igualmente de estas genialidades y decidieron reproducirlas.

Quizá el objeto más famoso del museo es el Tipu’s tiger, una escultura bastante grande que representa a un tigre indio atacando a un soldado europeo, en una clara crítica al colonialismo británico en el subcontinente.

La entrada es gratuita, y para llegar lo mejor es bajarse en la parada de metro de South Kensington, en las líneas District, Circle y Piccadilly del metro. Está muy cerca de otros museos, como el de Ciencias Naturales, y tiene otro centro en el este de Londres (Bethnal Green, línea Central del metro) sólo dedicado a los juguetes, el V&A Childhood Museum, que hará las delicias de los peques de la casa… y de los mayores.

GODS OWN JUNK por Teresa de El Faro de La Jument.

Lóndres es una ciudad de la que te puedes asombrar fácilmente. En cualquier rincón te puedes encontrar con algo estimulante, algo singular, algo que nunca has visto…En mi última visita a la capital británica, me llamó la atención “Gods Own Junk" un taller de neones de lo más singular. Está situado en el multicultural barrio de Walthamstow, concretamente en Unit 12, Ravenswood Industrial Estate, Shernhall Street, Walthamstow, London E17 9HQ.

Se trata del estudio del artista Cris Bracey, quien llevaba haciendo neones artesanalmente desde hace más de 40 años hasta que falleció. Llegó a convertirse en una institución entre los mejores directores de cine, entre ellos Tim Burton o Stanley Kubrick, siendo elegido para realizar sus creaciones en numerosas de sus películas, como es el caso de “Charley y la fábrica de chocolate”, “Capitán América” o “Batman” entre otras.

Traspasar la puerta de este local te transporta a otra época pasada. Cientos neones encendidos en una atmosfera ochentera te dan la bienvenida. Por el techo, por el suelo, por cualquier escondrijo hay neones entre viejos cachivaches. En la parte posterior hay habilitada una terraza. En ella se deja entrever alguna que otra lápida entre la hierba y letreros vintage camuflados entre enredaderas y palmeras, que se asemeja a un jardín con cierto toque apocalíptico.

Si estás en este lugar no puedes irte sin tomarte una buena cerveza. Justo en frente de “Gods Own Junk Yard” hay una pequeña fábrica de cerveza artesanal llamada “Wild Card Brewery”.

Londres es mucho más que el Big Ben, Palacio de Buckingham o La Abadía de Westminster, solo tienes que alejarte de las rutas establecidas y te llevarás muchas sorpresas.