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Jueves, 8 de Agosto 2013.

En Cluj-Napoca pasaríamos nuestra cuarta noche en el país, aunque en realidad nuestro objetivo era el cercano pueblo de Turda. Tras unos días tranquilos en Arad y Oradea, en la antigua colonia romana de Napoca se notaba mucho más ambiente. Estábamos en un gran centro universitario y en la tercera ciudad más poblada de Rumanía.

 

Eran casi las tres cuando el tren se detuvo, los alrededores de la estación no inspiraban demasiado por lo que caminamos hasta el centro por una larguísima avenida hasta llegar al río Somesul Mic. Los bloques de edificios grises y anodinos dieron paso a otros que recordaban el pasado húngaro de Cluj.

Elegimos el Hotel Transylvania, si bien su aspecto exterior no era de lo mejor, estaba en el centro y tenía un agradable patio interior. Hacía mucho calor así que dejamos las mochilas y salimos a beber algo.

 

Fue Ceaucescu quien le añadió a Cluj, el nombre de Napoca, para recalcar su pasado latino.
Cluj-Napoca fue la capital de Transilvania hasta 1918 cuando el imperio de los Hamburgo se divivió y la ciudad pasó a formar parte de Rumania.

 

Me pareció una ciudad tranquila y bonita, pero no recuerdo nada especial que me llamase la atención. Salvo el lío de cables, del tranvía y de la luz porque la electricidad de las casas va por fuera y aquello era un auténtico embrollo, no me gustaría ser electricista en Cluj. La gente seguía teniendo caras serias y ni siquiera en la oficina de turismo conseguimos una sonrisa.

Callejeamos hasta la Biserica Sfântul Mihail (San Miguel), la iglesia católica más grande del país. Está en la Piata Unirii, donde esa noche, después de la mejor cena de todo el viaje, veríamos un concierto de ópera. Bajo la atenta mirada de la estatua ecuestre de Matias Corvino, rey húngaro nacido en Cluj.

 

 
 
Viernes, 9 de Agosto 2013.

Nos despertamos temprano, el autobús salía a las 8,30 hacia Turda y hasta la autogara (estación de bus) aún teníamos que caminar un poco. Bajé a preguntar si podíamos dejar allí las mochilas hasta la noche y el recepcionista me pide con cara de circunstancias que pase y me señala los monitores de las cámaras de vigilancia del hotel.

No había tomado ni un café y no entendía nada hasta que me veo en blanco y negro fumando un cigarro apoyada en la barandilla que daba al patio. Miro al chico, éste la da a un botón y adelanta las imágenes hasta cuatro horas después, y entonces alucino al ver un tiesto del pasillo derritiéndose.

¡¡¡Pero qué me estás contando!! estuve a punto de decirle, no me dio tiempo porque empezó a explicarme que por culpa de una ceniza de mi cigarro casi quemo el hotel, que menos mal que cayó en el tiesto y no en una de las sombrillas del patio y que tenía que pagar cincuenta euros por los desperfectos porque sino tendría que llamar a la policía.

El día no empezaba bien, recordé olor a quemado cuando la noche anterior llegamos al hotel pero no le dimos importancia al no ver nada ardiendo.Tras despedirnos del hotel y de un billete de cincuenta salimos a una calle desierta a buscar un café que me ayudase a asimilar aquella historia.

Durante el viaje en minibus, Turda está a poco más de treinta kilómetros, no dejé de darle vueltas. Al final me lo tomé con humor porque no quería que me arruinase la visita a la curiosa salina.

 
 

Situada en un valle protegido, por la vegetación única de esta zona salina, la mina ocupa 45 kilómetros cuadrados y se cree que los romanos fueron los primeros en explotarla. Está abierta al público desde 1992 aunque las obras de renovación duraron hasta 2009 para convertir el lugar en una especie de parque de atracciones bajo tierra. Y con el calor que hace en Rumanía son muchos quienes van a pasar el día, convirtiéndose además en un destino balneario perfecto para alergias y problemas respiratorios.

La entrada cuesta veinte leis (unos 4,5 euros) y conviene ir abrigados ya que la temperatura es de 10-12 grados. Yo había visto algunas fotos pero sin entenderlas muy bien la verdad y es que aquello parece cualquier cosa menos lo que yo tenía entendido como mina. Sí hay pasadizos, cavernas, pasillos interminables y algunas evidencias propias de una mina pero con un aspecto futurista y de ciencia ficción que no deja indiferente a nadie.

 

Un grupo de periodistas del canal CNN han elegido la Salina Turda como el segundo lugar subterráneo más bonito del mundo. El primero es un río en Filipinas, mientras que el director de cine Christopher Nolan visitó la mina, interesado en grabar aquí escenas del "Caballero Oscuro". Y es que el lugar ideal para una batcueva.


 
 

El espacio central y más concurrido es la Rudolf Mine. Con 50 metros de ancho y 80 de largo, está ocupada con una gran noria,una bolera, mesas de billar y hasta un anfiteatro. Me quedé bastante desconcertada: había señoras sentadas haciendo punto y crucigramas mientras sus maridos jugaban a las cartas, niños corriendo por todas partes y padres jugando al tenis.


 
 

Pero sí, estábamos en una mina que funcionó durante 250 años y que sirvió durante la Segunda Guerra Mundial como refugio para la población local. Las sorpresas no terminaban, hay un lago subterráneo (Terezie Mine) en cuyo centro se formó una isla de unos cinco metros con residuos de sal y a la que accedes por un puente de madera. Incluso puedes alquilar un bote a remos para dar un pequeño paseo.

Nos alejamos del bullicio dominguero para perdernos por largos pasillos para llegar hasta The Crivac Room. una sala octogonal donde se conserva un cabestrante que era tirado por caballos para transportar la sal al exterior de forma vertical. Es el único en Rumanía y posiblemente en toda Europa.


 

Los mineros tenían una pequeña capilla, un nicho excavado en la pared de sal, ahora iluminado de azul y con imágenes de vírgenes y flores en señal de ofrenda.

Me encantó la Franz Joseph Gallery, una galería de casi un kilómetro construida (1853-70) para reducir los costes del traslado de la sal a la superficie y usada como almacén de queso.


 

Sinceramente salí de la mina un poco (bastante) desconcertada. Si bien es una visita que sí recomendaría porque es de esos lugares únicos, curiosos y con historia, me faltó quizá eso, algo que nos contase que había pasado allí abajo, cómo trabajaban los mineros...

Curiosamente, buceando por internet encontré hace unos días un corto de animación, creo que realizado por un grupo de estudiantes, sobre la Salina Turda. Un punto de vista interesante, perfecto para terminar el post y pensar sobre esa manía de convertir todo lugar en una especie de parque de atracciones.


 

Después de casi dos horas en las profundidades al fresco, el calor del mediodía fue como entrar en una sauna. Pensando en el largo camino que nos quedaba, compramos agua y sin saber muy bien por dónde, llegamos al pueblo en poco más de quince minutos. El no saber, había hecho que para subir cogiésemos el camino largo e interminable, entendimos así las miradas desde los autobuses que nos pasaban, debíamos ser un poema caminando por aquella carretera a treinta grados.

21 Comments

  1. Ruben dice:

    No imaginas las ganas que tengo de visitar Rumanía, creo que debe de ser un país super interesante y está entre los que más ganas de visitar me provoca de Europa. No había escuchado hablar sobre esta Salina Turda y la verdad que me ha parecido una visita muy interesante, a mí me pasa lo mismo cuando visito un lugar y no me entero bien de lo que allí pasó así que gracias por compartir el vídeo para enterarnos mejor.
    ¡Un abrazo!

  2. Curiosísimo lugar. Ya había leído y comentado el post hace 3 años, de manera que cuando visitamos las minas de Sal de Wieliczka en Polonia hace año y medio me acordé cantidad de Salina Turna. La verdad es que estas grandes salas profundas repletas de sal son muy semejantes. No me extraña que la CNN las haya considerada el 2o lugar como el segundo lugar subterráneo más bonito del mundo. Verdaderamente asombroso.

  3. ¡Me encantan estos diarios de viaje porque me llevas contigo en la mochila de Maruxaina! Reconozco que nunca había escuchado hablar de la Salina Turda ¡y ahora quiero ir! Le tengo muchas ganas a Rumanía pero aún no he cuadrado la fecha, aún así creo que sé muy poco de este país así que cuando por fin se alineen los astros me leeré tooooodos toditos tus post con detalle, un abrazo guapa

  4. Kris dice:

    Nosotros no teníamos en mente visitar la Salina Turda pero un cambio de última hora nos llevó hasta ella. A nosotros nos gustó la experiencia y nos pareció un lugar singular como pocos. Muchos dicen que no valen nada, que si las polacas y bla bla bla. En fin, a mi me pareció espectacular y para serlo desde luego no necesita escultural del sal. Y si los entendidos dicen que uno de los lugares más bonitos bajo tierra ¡por algo será!

  5. Me alegra no “perder” tiempo en Cluj Napoka cuando confeccionábamos nuestra ruta por Rumanía. Si tú – siempre tan generosa con los lugares que visitas y que muy pocos te dejan indiferente – si tú dices que no recuerdas mucha cosa… será que no la hay 😉
    ¡Qué historia la del cigarillo! Pues sí, menos mal que no fue a más.
    Entonces, ¿cómo se visita la mina? Tengo entendido que puedes entrar por libre y pasar allí el día si fuera hace demasiado calor, ¿correcto? Vamos, como si fuera un lugar de reuniones para los vecinos y un lugar curioso para turistas…

  6. […] visita a la Salina Turda nos había abierto el apetito así que paramos a comer algo antes de seguir hacia nuestro próximo […]

  7. Pepa Alvarez dice:

    Habrà que visitarlas ya que la descripcion es muy agradable y apetece darse unos paseillos por allí!!Es un lugar curioso sin duda!

  8. No he tenido todavía el placer de visitar Rumania, aunque la verdad que tiene muy buena pinta. Además, con lo que a mí me gustan las cuevas..muy buen post!
    Saludos!

  9. ori dice:

    Me pasa con los lugares subterraneos que me dan un poco de claustrofobia, pero me encantan, asi que me paso todos los paseos debatiendo conmigo misma :). Excelente post, Rumania tiene una excelente pinta

    • Maruxaina dice:

      Muchas gracias!!
      En estas minas no creo que tuvieses mucho problema,está muy iluminada,no hay pasillos estrechísimos y con todo lo que montaron no da la sensación de estar en una mina …jajaja
      Rumanía tiene mucho por descubrir!!
      Un saludo 🙂

  10. Que bueno, es precisos…..aunque debe de impresionar mucho estar en esas minas. Me he anotado el lugar, gracias por compartir 😉

    • Maruxaina dice:

      Si viajas a Rumanía sí es una buena y curiosa visita.Además tienen también una zona de spa,nosotros no lo sabíamos y no nos dio tiempo pero seguro que está genial 🙂
      Un saludo!!

  11. Raúl dice:

    No he estado en Rumanía aunque cuando me he interesado por este país no había visto Cluj Napoca como uno de los sitios más interesantes, y menos estas minas, muy curioso, estuve hace algunos años en las de Wieliczka en Polonia y me encantaron, saludos viajeros.

  12. No he estado en Rumanía aunque cuando me he interesado por este país no había visto Cluj Napoca como uno de los sitios a visitar, y menos estas minas, muy curioso, estuve hace algunos años en las de Wieliczka en Polonia y me encantaron, saludos viajeros.

    • Maruxaina dice:

      Hola Raúl,
      Nosotros paramos a dormir en Cluj pero apenas la visité,fue el punto de partida para ir a las minas.
      Rumanía tiene mucho para ver y visitar,te lo recomiendo 🙂
      Un saludo!!

  13. Caramba, muy curioso! La verdad es que aunque sí que he estado en Cluj Napoca, no conocía la existencia de estas minas o sea que no lo incluí en nuestro itinerario por Rumanía. Una pena.
    Un saludo viajero!

    • Maruxaina dice:

      Hola Jordi,
      Lo nuestro fue al contrario,de hecho apenas conocimos Cluj 😉
      Si vuelves a Rumanía no dudes en visitarlas!
      Gracias por la visita,un saludo 🙂

  14. Miryam dice:

    Aiiii quiero ir a Rumanía ya 🙂 Me han hablado maravillas del país y su orografía seguro que me encantaría, tanto bosque y verde tiene que ser precioso. No tenía ni idea de la Salina Turda, así que me lo apunto para visitarla. Saludos

    • Maruxaina dice:

      Hola Miryam,
      Yo apenas sabía nada del país y me sorprendió mucho.Tiene lugares increíbles para visitar,como tu dices muchos bosques y mucho verde.
      Un saludo!!

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